20 Sep Resuinsa: Textil 360⁰
Ubicar un showroom en un garaje. A priori, escoger un entorno frío y oscuro como este, nada amable para dar a conocer productos textiles, puede parecer una idea poco acertada. Sin embargo, Resuinsa ha elegido el garaje subterráneo de sus oficinas de forma intencionada, como un reto para el ingenio y la innovación con el diseño textil como elemento arquitectónico. El resultado es “Textil 360⁰”, un espacio asombroso, diseñado por BoMa, un innovador estudio de arquitectura y diseño, junto con Carmela Martí, empresa especializada en interiorismo textil.
Al acceder desde las oficinas al garaje, el visitante se topa de frente con una estampa futurista: una gran estructura circular iluminada potentemente por una luz blanca. Es una pieza continua que no desvela qué puede guardar en su interior. En ese momento el entorno, el de los colores inhóspitos y las plazas para vehículos, ha desaparecido para el visitante, eclipsado por la inusual estructura. Con un sencillo mecanismo la gran pantalla lumínica se abre, mostrando un acceso hasta entonces oculto, y que da paso a un sorprendente showroom en el que los visitantes pueden conocer los productos de Resuinsa a través de varias estancias.
El interior es cálido. La iluminación, los colores, la climatización, los propios productos textiles acogen a quien se adentra en este revolucionario showroom. De nuevo nadie diría que uno se encuentra en un garaje. Más bien en el contexto de una feria internacional del sector o en un museo. Dentro todo es una inteligente y precisa demostración de arquitectura textil en la que las cortinas sirven para delimitar espacios, haciendo al mismo tiempo de tabique y de difusor de la iluminación. Todo lo que rodea al visitante, tanto pavimento como luminarias, son de material textil sirviendo, asimismo, de marco en el que se exponen las nuevas tendencias de Resuinsa.
El recorrido es circular y por espacios, para mostrar al cliente todos los productos expuestos en su contexto, combinándolos además con otros elementos, aportando inspiraciones para la decoración y poniendo en valor el producto de la firma. Inmerso en una cuidada iluminación, el visitante avanza por varios espacios como un baño, un dormitorio o un salón, pero nunca ve cuál será el siguiente, manteniendo la expectativa. La última estancia es un área de trabajo, un despacho, en el cual Resuinsa puede atender al visitante al que sorprende de nuevo con un armario textil inapreciable hasta que se descorre una cortina.
La idea del proyecto nace de la “constante búsqueda de innovación de la compañía”, según explican, que entiende el textil “como creador de experiencias” y ha querido llevar este concepto a su máximo exponente con este showroom Textil 360⁰, demostrando el poder del textil para transformar el entorno y su capacidad de crear ambientes cálidos y confortables en cualquier lugar.